Varas Alarcón, Magaly35 p.p.Reyes Núñez, Javier2023-03-312023-03-312023-01https://hdl.handle.net/20.500.12536/1912Las nuevas tecnologías, el avance de otros elementos de esparcimiento y el aumento de herramientas para saciar el ocio dentro del hogar han provocado que las personas pierdan el sentido de pertenencia de las calles, de apropiarse de los caminos del barrio y de olvidarse de lo importante que fueron, son y serán estas vías para conectarnos con los otros. Ottone (2007) indica que el sentido de pertenencia es elemento subjetivo que está compuesto por percepciones, valoraciones y disposiciones de quienes integran la sociedad (p. 22). Para que exista, dependerá de varios factores, entre ellos el uso y cuidado de espacios comunes como la ciudad y el medio ambiente; una participación más amplia en instancias de deliberación y en la expresión pública de aspiraciones y visiones de mundo; y la humanización de los principales espacios de socialización, como la familia, el vecindario, el trabajo y la escuela (Ottone, 2007, p. 23). La ausencia de ese poder de apropiarse de los espacios ha generado que a las personas no les haga sentido las calles. Existe una crisis de la ciudadanía hacia lo externo, las personas se sienten lejanas y eso lleva a que no las cuiden ni protejan, y también sean parte, directa o indirectamente, de su destrucción de forma estética o física. En el caso del Barrio Yungay, pese a tener un potente sentido de comunidad de sus vecinos, se siente aislado de la curiosidad por la historia que ha recorrido sus calles. Es importante comprender que las personas les dan vida a las calles, son parte fundamental de sus sucesos y sin ellas solo son espacios vacíos, como todos vimos lo que sucedió a nuestro alrededor durante la pandemia de covid-19 en 2020. Es el momento ideal para que los ciudadanos hagan suyas sus calles, descubran qué ocurrió en aquellas veredas que sirven de guía para el destino y se nutran con la historia que hubo en esos adoquines que aún sobresalen por los rincones del Barrio Yungay. Este barrio es uno de los lugares más relevantes, históricos y conocidos de la ciudad de Santiago. Su historia se remonta a 1835, en la primera mitad del siglo XIX, cuando José Santiago Portales, padre de Diego Portales, era dueño del terreno hacia el oeste de lo que era el centro de Santiago (Memoria Chilena, s.f.). Ese sector de 350 hectáreas fue herencia para todos los hijos de José Santiago Portales cuando falleció en 1835. La decisión de sus descendientes fue dividir y vender el terreno a loteadores, que comenzaron a poner las primeras líneas de calles del barrio, que aún no tomaba su actual nombre. La plaza y la parroquia San Saturnino iniciaron la historia del barrio, que, pronto, en 1839, comenzó a delinear su actual mapa de calles y fundándose en su nombre tras la batalla de Yungay gracias al decreto fundacional firmado por el presidente José Joaquín Prieto. El presidente Prieto delimitó el Barrio Yungay en San Pablo por el norte, Brasil por el este, la Alameda por el sur y Matucana por el oeste. Llama la atención que, de esas cuatro calles, dos no se llamaban de esa forma en el momento de la firma del presidente Prieto. ¿Cómo pasó de conocerse como Camino a Valparaíso a San Pablo, aquella mítica calle que atraviesa hoy cuatro comunas y que en algún momento encaminó al Papa Juan Pablo II en su única visita a Chile?, ¿a qué debe su nombre esta calle y por qué fue tan importante para el Santiago del siglo XIX? El Barrio Yungay hoy recibe carnavales en primavera (Fiesta Primavera en Yungay, s.f.), cuecas más allá de las Fiestas Patrias gracias a organizaciones sociales y culturales que llenan de "zapateos" la calle frente al "Huaso Enrique" (El Huaso Enrique Oficial, 2022) y hasta es partícipe de los paseos callejeros y cercanos con la gente del presidente Gabriel Boric, que fijó su residencia presidencial en calle Huérfanos (CHV Noticias, 2022). El proyecto que se presenta a continuación desarrollará una plataforma web, una app y contenidos en Spotify y YouTube que muestre en tiempo real la historia de la calle en la que se está en el Barrio Yungay, se pueda apreciar de forma turística los atractivos a lo largo de su extensión y pretende aportar para que los ciudadanos salgan a la calle a hacerlas suyas, con una narrativa transmedia que ocupará distintas herramientas digitales para su funcionamiento.Espacio públicoBarrio YungayCalles de SantiagoLa historia de Barrio Yungay de Santiago a través de sus callesTesis